Reciclando los componentes de un horno microondas

Desmontando las partes de un horno microondas para darles un nuevo uso

Todo aparato fuera de uso, si pensamos un poco, nos puede ser muy útil de otras formas. Tal vez, evitamos desecharlo por completo, si podemos reciclar algunas de sus partes.

Un horno de microondas es una fuente de componentes muy interesantes para realizar experiencias como una bobina de Tesla, un transmisor Marconi, un equipo de soldadura por puntos o diversas fuentes de alimentación.

Antes de empezar, es necesario advertir que nunca, en ningún caso, se ha de desmontar un horno de este tipo con el cable de alimentación conectado a la red eléctrica, puesto que en este caso puede haber en su interior tensiones muy peligrosas por su alto voltaje, que en ciertos puntos alcanza los 4.000 volts.

Antes de comenzar con el desarme, leeremos en la parte trasera la información de la placa identificativa: 

Marca: LG, modelo: MG-392A. 
Consumos: microondas: 1.200 W, grill: 1.100 W, total: 2.250 W. 
Potencia de cocción en miocroondas: 850 W. 
Frecuencia 2.450 Mhz. 

Una vez averiguadas sus características eléctricas y electromagnéticas, y de habernos cerciorado de que el cable de corriente no está enchufado a la red, quitamos la tapa y ya podremos distinguir la mayoría de los componentes internos, interconectados de una maraña de cables multicolores.

Los más visibles por su tamaño son sin duda el magnetrón y el transformador que lo alimenta. En este caso el magnetrón está situado al centro de la parte superior, y tiene la forma externa de cubo de chapa galvanizada en el cual se distinguen lateralmente unas aletas de refrigeración. 

El magnetrón es un tipo de válvula de vacío especial capaz de generar por sí sola un potente chorro de microondas, el cual por corrientes de Foucault calienta y cocina los alimentos. El modelo que equipa este horno LG es el 2M214, la información técnica puede encontrarse en Datasheet-2M214 

Esta válvula es capaz de entregar una potencia máxima de 1000 watios y nominalmente, como en el caso de este horno, de 850 W. Según las tablas de características, la alimentación del filamento es de 3,3 volts y 10 Amps, estando el bloque del ánodo a potencial de tierra y el filamento a potencial negativo de -4.000 Volts. 

Antes de iniciar el desmontaje mecánico debemos asegurarnos que en ningún punto quedan restos de tensión eléctrica, y como el único componente capaz de almacenarla es el condensador del doblador de tensión, tomaremos una resistencia de 100 Kohms, de dos vatios y la sujetaremos con cinta aislante en el extremo de un mango de material plástico. 

 

Transformador de alta tensión y magnetrón 

Seguidamente doblaremos sus terminales hacia adelante en forma de horquilla. Localizaremos el condensador y procederemos a cortocircuitar sus dos bornes con los terminales de la resistencia.

Los condensadores pueden retener la carga por muchas horas después de haber retirado la alimentación, y si bien la capacidad de 1 microfaradio no puede acumular la energía suficiente (2 julios) para resultar peligroso para una persona sana, sí puede darnos un buen susto.

Algunos condensadores de este tipo ya llevan interiormente una resistencia en paralelo de 10 Megaohms, precisamente para descargar en poco tiempo la carga residual, pero como sin desmontarlo no podemos ver si es un modelo antiguo sin resistencia, no correremos el riesgo y le aplicaremos nuestra propia descarga. 

El transformador de alimentación, que aparece ya extraído en la imagen anterior, junto al magnetrón, es el que provee de la alta tensión necesaria para que funcione este componente. 

Tiene una entrada de 230 Vac y una salida de 2.000 Vca. siendo capaz de manejar una potencia de algo menos de 1 Kw. 

 

Observamos que los bobinados de alta y de baja están físicamente separados, lo cual nos resultará útil en el caso de necesitar remover uno de ellos para alguna aplicación específica. 

Otro detalle es que uno de los terminales del bobinado de alta está unido al chasis del propio transformador y que existe un tercer bobinado externo adicional de muy pocas espiras (2 ó 3), cuya misión es suministrar una tensión alterna de alrededor de 3 volts para alimentar el filamento del magnetrón. 


La placa del fusible y el filtro de entrada anti-parásitos 

Seguidamente procederemos a desmontar la placa del fusible y el filtro de entrada, cuyo trabajo de proteger el propio aparato y la red eléctrica ante posibles cortocircuitos y contra el paso de radiofrecuencia, tanto de entrada como de salida. 

Esta placa contiene un filtro formado por una bobina toroidal, un condensador de 220 nF y dos de 4,7 nF, capaces de absorber los picos de poca duración que puedan llegar o salir del microondas. 

La bobina toroidal la podemos usar en un filtro, como tal, o aprovechar el aproximadamente 50 cm. de cable de cobre de sus espiras, ya que es de 2 mm. y puede ser excelente para devanar bobinas de radiofrecuencia de un emisor de onda corta. 


El ventilador de refrigeración del magnetrón y el condensador de alta tensión 

  
Ahora desmontaremos el soporte de plástico situado en la parte derecha, encontrando un ventilador movido por un motor de alterna monofásico y escondido en la parte baja el condensador blindado de 1 microfaradio del que ya hemos hablado anteriormente, en cuyos terminales vemos también un diodo rectificador de alta tensión y otro componente del tipo doble diodo que actúa de protección.
 

 

En cuanto al motor del ventilador puede utilizarse como tal, conservando las aspas, o como motor de giro de mecanismos diversos, o también desmontar su bobina para aprovechar el hilo esmaltado para devanar transformadores e incluso el secundario de una pequeña bobina de Tesla.

Un detalle a observar sobre el motor de este horno LG es que el bobinado es de tres hilos, siendo uno de ellos una toma que está aproximadamente al 10% de un extremo y al 90% del otro. Pues bien, en realidad constituye un autotransformador que nos da 21 volts, destinados a mover un pequeño motor síncrono. 

 

Térmicos que impide suministro eléctrico

en caso de alta temperatura

Después le tocará el turno a dos protectores de sobretemperatura del tipo bimetálico, cuya misión es interrumpir el funcionamiento del horno si por cualquier razón, la plancha metálica donde están sujetos, supera cierto valor. 


Estos contactos son del tipo "normalmente cerrados", es decir que conducen la corriente, y se abren al calentarse por encima de cierto punto. Naturalmente, al ser bimetálicos tienen una cierta "histéresis" y al enfriarse se cerrarán de nuevo a una temperatura inferior a la de disparo.
 

Para averiguar sus características basta observar su parte inferior, la que está en contacto con la chapa metálica, en donde suelen llevar dos cifras separadas por una barra inclinada. Por ejemplo 100/80, en que la primera será la temperatura de activación, y la segunda la de rearme. 


Motor sincrónico de giro del plato 

Quitando la tapa inferior del horno, accederemos a un pequeño motor destinado a hacer girar el plato-carrusel donde se depositan los alimentos a cocinar. Se trata de un motor síncrono autoarrancable equipado con reducción mecánica. 

En este caso se trata del modelo SSM-16H, que se alimenta con 21 Vac (procedentes del motor del ventilador), consume unos escasos 3 vatios de potencia y el eje final da entre 2,5 y 3 revoluciones por minuto.

Lámina aislante de mica

Otro componente útil para muchas experiencias es una lámina aislante de mica prensada, que en este caso, podemos encontrar como separación entre la salida del magnetrón y la cavidad del horno.

Para desmontarla, abriremos la puerta de cristal y con sumo cuidado -puesto que es fácilmente quebradiza- y quitaremos los dos tornillos que la sujetan. Una vez fuera, la limpiaremos con un poco de disolvente de los restos de grasa que la impregna.

Bombilla de iluminación interna

De la parte superior sacaremos la bombilla de iluminación interna, algo distinta a las utilizadas en el interior de hornos eléctricos o de gas butano, ya que la temperatura de funcionamiento de este tipo de horno es sensiblemente inferior.


En la parte izquierda de la primera imagen podemos intuir varios soportes de plástico de utilidades diversas. En uno de ellos encontraremos 2 interruptores tipo "switch" de dos contactos y un conmutador de tres, que nos serán útiles como finales de carrera en montajes electromecánicos.
 

  

Reloj programador

A estas alturas ya no quedan muchas cosas aprovechables en el horno de microondas, pero de entre lo montado en la parte trasera de la tapa frontal, en donde aparecen los mandos del horno, podemos aprovechar el reloj-programador, un relé de potencia y una resistencia bobinada de 20 vatios.


Este reloj también va equipado con un motor síncrono, pero en este caso es de 220 volts, y podemos utilizarlo tal cual, como temporizador ajustable para un máximo de una hora, (aunque al depender de la frecuencia de red no es demasiado preciso), o bien desmontar el conjunto y utilizar motor, engranajes, contactos y microrruptores por separado.
 

 

Durante el funcionamiento normal de horno, los pequeños contactos del reloj-programador no pueden controlar directamente la intensidad que precisa el mangnetrón para funcionar, por este motivo se utiliza un relé auxiliar. 

Relé de activación del magnetrón y resistencia bobinada de 30 Ohms, 20 w.

Este horno, tiene además una resistencia bobinada de 20 w, de la cual, por carecer del esquema, se desconoce su función específica, pero en todo caso, será perfectamente aprovechable. 


Y por último, se observa que este modelo concreto de horno lleva “grill” incorporado, para poder "dorar" los alimentos que cocinemos. Y esto nos permite también desmontar la resistencia eléctrica correspondiente, cuya potencia, según los datos leídos en la placa de características, es de 1.100 vatios. 

La totalidad del material reciclado del microondas LG tipo MG-392A


Vía:  Sites.google.com/site/anilandro/